La emoción de un niño ante la diversión que le provoca el juego en sí mismo, es el hilo conductor de este poemario. A través de las rimas y los versos de los distintos poemas se evocan distintos momentos, donde el juego de los niños se hace presente. Dotado de una afable musicalidad, trata de facilitar la lectura de los versos como un juego de palabras. Una lectura amena y divertida que emocionará a los niños para introducirlos en el mundo de la poesía.